Estadista Nacional, más que números...

Domingo F. Sarmiento
(15 de feb de 1811 –  11 de sep 1888)
político, escritor, docente,
periodista, militar, estadista,
y político argentino.

En 1869 Sarmiento, en su legitima posición de representante del ejecutivo nacional, ordenó que se realizara el primer censo nacional de población. Impulsado por sus ideales de progreso se dio tiempo para encargar y seguir de cerca ese proyecto por el cual se obtendrían los primeros números oficiales con los que se apoyaría la clase dirigente en la toma de decisiones frente a las políticas públicas.

Los números valdrían como inferencias basadas en el cálculo de probabilidades, es decir lo que hoy se conoce como mediciones estadísticas profesionales. Y el censo, resultó acercar la información por el que hoy sabemos que hasta ese entonces, el analfabetismo alcanzaba el 71%.

El país, ya unificado todavía estaría próximo a encarar los últimos enfrentamientos entre sus provincias. A pesar de la unidad nacional, en su geopolítica social el país tenía problemas gigantescos de identidad integradora.

Sarmiento y Rivadavia después de tantas guerras civiles, reflejadas en las batallas, necesitaban saber quiénes y cómo éramos como nación. La estadística entonces permitió no sólo contar las pérdidas en las batallas, sino poder vislumbrar estos indicadores que nos develaban información concreta de cómo administrar las políticas públicas de nuestra nación en los años venideros.

Es así como Francisco Latzina entra en este escenario. Latzina nació en 1842 en Brüm, Moravia. Inició la carrera militar en su patria natal y luego de ser herido en combate 1864, abandona el servicio activo. Viaja varias veces a América del Sur, radicándose finalmente en Buenos Aires a comienzo de la década de 1870 donde conoce al entonces presidente Domingo F. Sarmiento, quien decide su contratación en 1872 como profesor de Matemáticas para el Colegio Nacional de varones de Catamarca, pronto a inaugurarse. Gracias a la admiración de Sarmiento en sus conocimientos matemáticos, astronómicos y meteorológicos, Latzina consigue acceder al circulo de intelectuales nacionales. Nuestro presidente pone al descubierto su amplio dominio y conocimiento en estas materias frente al director del entonces Observatorio Nacional, el sr Benjamin A. Gould, quien le propone trabajar allí.

Francisco Latzinga (1843 - 07 oct 1922)

Posteriormente Francisco Latzina fue adquiriendo mayores responsabilidades en la labor de la medición, es conocido su trabajo durante 1874. Aquel año realizó prolijas mediciones de las diferencias de nivel entre el Observatorio y la plaza principal de la ciudad de Córdoba. Luego, también se conoce el trabajo  sobre los valores medidos en la nivelación del ferrocarril Central Argentino.

Diez años después, en 1880, Latzina fue designado jefe de la Oficina Estadística Nacional, luego de recibir el título de Doctor “Honoris Causa” el 13 de septiembre de 1880 en la Universidad de Córdoba, junto a los integrantes de la Academia Nacional de Ciencias, L. Brackebusch, Adolfo y Oscar Doering, J. Hieronymus y A. Seelstrang. Es entonces como el 14 de septiembre, las autoridades de la Facultad, donde daba clases, aceptarían la renuncia de Latzina, quien se haría cargo de la Jefatura de la Oficina de Estadística Nacional, posterior Dirección General de Estadística con asiento en Buenos Aires.

Copia de la carta oficial dirigida al Ministro N. Avellaneda
solicitando la designación de F. Latzina.

Este es el origen de un personaje de incuestionable valor para la edificación de nuestra cultura nacional. Hago este post para acercarnos más a la historia de la profesión que a través de las Mediciones consiguen establecer los valores que indican para dónde dirigir a nuestro país. Esta profesión tiene un irreprochable origen necesario en nuestra nación, sobre todo para nuestro pueblo, porque allí se fundan y se radican los planes de las políticas publicas de nuestra clase dirigente.